Aceptación de la neurodivergencia: cómo eliminar el estigma contra el autismo
Muchas personas del espectro autista han adoptado el concepto de neurodiversidad porque es reivindica la existencia de distintas estructuras cerebrales, y en consecuencia, variadas formas de experimentar la realidad.
En todo el mundo existen numerosas culturas que perciben el autismo como causa de vergüenza. ¿Cuántas veces hemos oído a personas tener “miedo” que su hijo o hija nazca o sea autista?
Los investigadores creen que el estigma social que rodea a afecciones como esta puede impedir que las familias busquen diagnósticos y servicios para sus hijos.
Además, dificulta la participación plena en sus comunidades, e impide que de una mejor calidad de vida.
La capacidad de una persona autista para hacer amigos, tener citas y conseguir o mantener un empleo puede verse afectada por el estigma que pesa sobre ella. E incluso, hay veces en que los adultos dudan a la hora de informar a sus médicos de que tienen autismo.
¿Qué es exactamente el estigma?
Según el sociólogo Erving Goffman, los estigmas tienen sus raíces en la antigua Grecia. En concreto, los grupos de la sociedad griega marcaban a los individuos de criminales, traidores o esclavos para distinguirlos y señalar su condición de parias. El estigma es un atributo que desacredita en gran medida a una persona y las aísla.
Las personas con autismo y sus familias experimentan un sentimiento de vergüenza y distanciamiento que no difiere del que encuentran otros grupos con características singulares.
El autismo suele asociarse a comportamientos que la sociedad considera aterradores o incómodos. Los individuos con autismo pueden mostrar comportamientos agresivos, como pegar, gritar o hacerse daño a sí mismos. Pueden invadir el espacio personal de otros individuos, mostrar desprecio por las normas sociales o reírse y hacer ruido en momentos inadecuados.
Estas características, que no son comprendidas por la sociedad, hacen que aumente el rechazo y el estigma. Esto se profundiza cuando el resto no sabe que tiene autismo.
Y esto es algo muy común para las personas autistas, porque muchas de ellas tienen el mismo aspecto que un neurotipico.
A muchas familias de niños autistas les preocupa cuando sus hijos muestra un comportamiento inesperado o incontrolable. Porque las personas que presencian el hecho no entienden por qué el niño actúa así. La razón es la ausencia de signos inequívocos que indiquen la causa del comportamiento. A los padres puede preocuparles que el comportamiento de su hijo se atribuya a malas habilidades parentales, pereza, falta de motivación u otras cualidades negativas del niño o de la familia.
El estigma y el movimiento de la neurodiversidad
Los esfuerzos para eliminar el estigma que rodea al autismo y hacer hincapié en la neurodiversidad han sido liderados por adultos con autismo y sus padres. Este es un término acuñado por una socióloga autista, Judy Singer.
La Neurodiversidad se centra en potenciar los puntos fuertes de las personas con autismo, al tiempo que hace hincapié en la valiosa contribución que las diversas diferencias humanas aportan a la sociedad.
Así como expresa María Stroman de la ONG “Creando Luz”, bajo este concepto, muchas personas autistas se comenzaron a sentir orgullosas de lo que son. A continuación, junto a nuestra colaboradora María Stroman te comentamos los beneficios del concepto de la neurodiversidad para el autismo:
- Celebra a las personas por su identidad única.
- Crea cierta distancia con respecto a una mentalidad de “sufrimiento”. Más bien, reconoce las diferencias y anima a aprovechar cada momento.
- Puede ayudar a crear una representación justa de las personas neurodiversas en los entornos laborales.
Ahora bien, si decimos que el concepto de neurodiversidad se centra en las virtudes de las personas neurodivergentes, queda preguntarnos: ¿cuáles son los puntos fuertes de las personas con autismo?:
- Enfocan las cosas de una manera única
- Tienen una estrecha relación con la tecnología y los temas mentalmente desafiantes.
- Pueden obtener habilidades musicales extraordinarias.
- Son más detallistas que los individuos neurotípicos.
- Poseen una gran capacidad visual-espacial.
- Sus perspectivas son muy creativas y de naturaleza distintiva.
Las personas con autismo pueden poseer cualidades ventajosas para las empresas, como la persistencia y la capacidad de ver las cosas desde un ángulo inesperado; esto es extraordinario para el pensamiento crítico.
Sin embargo, buscar trabajo y conservarlo puede ser todo un reto para una persona autista. Porque la capacidad de comunicación se ve afectada por el autismo. Durante las entrevistas, las personas pueden tener dificultades para responder a las preguntas y enviar mensajes negativos a través de su lenguaje corporal.
Además, una sobrecarga sensorial excesiva puede impedir tu tranquilidad y perjudicar su rendimiento laboral mientras está empleado.
María Stroman nos aporta una visión en la que explica que comprender y aceptar la neurodiversidad puede fomentar la inclusión de todas las personas.
La neurodiversidad es una realidad impuesta naturalmente: por tanto, intentar rechazar el concepto de neurodiversidad es tan inútil como rechazar la existencia de la biodiversidad.